Publicidad

 

UC - Críticas

País: España.
Año: 2009.
Duración: 103 min.
Género: Drama.

Dirección y guión: Álvaro Pastor y Antonio Naharro.
Producción: Julio Medem, Koldo Zuazua y Manolo Gómez Cardeña.
Música: Guille Milkyway.
Fotografía: Alfonso Postigo.
Montaje: Nino Martínez Sosa.
Dirección artística: Inés Aparicio.
Vestuario: Fernando García.
Distribuidora: Golem.

Estreno en España: 16 Octubre 2009.


UN AMOR DIFERENTE

"Yo, También" es una película necesaria que retrata una historia de amor creíble con una pareja protagonista con mucho "feeling", la siempre estupenda Lola Dueñas y el debutante Pablo Pineda, ambos premiados en el Festival de Cine de San Sebastián, que supone un retrato sincero sobre un joven con síndrome de down sin llegar a caer nunca en sentimentalismos baratos.



Daniel, un joven sevillano de 34 años, es el primer europeo con síndrome de Down que ha obtenido un título universitario. Comienza su vida laboral en la administración pública, donde conoce a Laura, una compañera de trabajo. Ambos inician una relación de amistad que pronto llama la atención de su entorno laboral y familiar. Esta relación se convierte en un problema para Laura cuando Daniel se enamora de ella. Sin embargo, esta mujer solitaria que rechaza las normas encontrará en él la amistad y el amor que nunca recibió a lo largo de su vida.




"Yo, también" es una historia de amor atípica entre una mujer con discapacidad emocional y un hombre con síndrome de down. Intenta evitar los momentos sentimentaloides y la película funciona bastante bien desde la honestidad, sobretodo gracias a la química existente entre los dos actores protagonistas y al trabajo de Pablo Pineda que realmente padece la enfermedad, pero que no se limita a imitarse a sí mismo sino que realiza un estupendo trabajo que otorga más credibilidad al conjunto del film.



Es cierto, sin embargo, que al conjunto le falta algo de valentía en el momento culminante y que todo acaba resultando demasiado políticamente correcto y que las buenas intenciones pesan más que la profundidad de la historia. En busca de esa credibilidad los directores apuestan por una puesta en escena nerviosa, cámara al hombro y estética de docudrama, que en ocasiones resulta demasiado apabullante y consigue el efecto contrario al buscado, desconectándote de sus imágenes, pero sólo sucede en algunos momentos. En su conjunto, un film más que correcto que busca y encuentra la empatía con el público.


UC (Daniel Farriol).

TRAILER